¡Anoche fui abducido por Extraterrestres!

Primer escenario:

Estaba yo manejando mi auto distraído, apartado de la ciudad más cercana,  en un paraje alejado en medio de una ruta poco transitada de Santa Fé, de repente llegaron unos seres del espacio exterior en su OVNI, me lanzaron un rayo paralizante y se me paró el motor del auto y me desmayé, me subieron a la nave espacial y me llevaron a un planeta distante. Me metieron en una habitación extraña y muy iluminada y me rodearon, me sujetaron por las dudas que me despierte, me hicieron experimentos, me pincharon con agujas, tomaron muestras, y me inyectaron en la nuca un dispositivo subcutáneo de rastreo. Luego me llevaron de regreso a donde me encontraron, pero no me dejaron en la exacta misma parte de la ruta y en la misma posición sino que me tiraron por ahí y se fueron en su OVNI dejando por detrás un impresionante haz de luz.

Segundo escenario:

Está un elefante caminando distraído, apartado de la manada, en un paraje alejado en medio de la sabana de África, de repente llegan unos científicos europeos en su JEEP 4×4,  le lanzan un dardo tranquilizante y cae y se desmaya, lo suben a la camioneta y se lo llevan a un pueblito cercano. Lo meten en un laboratorio y lo rodean, lo sujetan por las dudas que se despierte, le hacen experimentos, lo pinchan con agujas, toman muestras y le pegan detrás de la oreja un radiotransmisor de rastreo. Luego lo llevan de regreso a donde lo encontraron, pero no lo dejan en la exacta misma parte de la sabana y en la misma posición sino que lo tiran por ahí y se van en su JEEP dejando por detrás una impresionante estela de humo y polvo.

Esto es algo que siempre me llamó la atención (y nunca escuché que nadie además de mí lo note o lo comente, ni en películas ni en documentales magufos ni en ningún lado): el extraño parecido que hay entre el proceso (que cuentan) de abducción extraterrestre y… lo que nuestros científicos hacen cuando realizan estudio de campo de animales.

Así, también siempre me pregunté qué les dirá a sus amigos ese elefante abducido cuando regresa. Que fue secuestrado por pequeños elefantitos no-grises que no tenían trompa y caminaban en dos patas, se comunicaban con sonidos extraños y lo llevaron en un vehículo misterioso más tecnológico que cualquier árbol o nube que él haya visto y que le  colocaron algo atrás de la oreja y que encima, pareciera que siempre saben dónde está y cada 6 o 12 meses lo visitan de nuevo. ¿Qué pensará? ¿Cómo interpretará su mente de elefante, su memoria de elefante y su imaginación de elefante, lo que le ha sucedido?

Me pregunto si los demás elefantes le creerán o pensarán que está loco y bebió agua estancada. Me pregunto si los elefantes tendrán en su idioma elefante una palabra para cuando ven un «safari» que signifique lo mismo que nuestra expresión «encuentro cercano del tercer tipo». Y me pregunto si los extraterrestres tendrán zoológicos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *